CARA A CARA CON LAS EMOCIONES NEGATIVAS, CÓMO MEJORARLAS

 

  ¿Cómo podemos influir en nuestra autoestima cuando somos adultos?

La autoestima , como su nombre indica y sobre todo  a los valencianos y catalanes nos resulta fácil entender su significado de "auto" "estima" es quererse a uno mismo- 

Quererse a uno mismo, o mejor dicho amarse a uno mismo, más allá de sólo nuestra imagen, gustarnos, de lo que hacemos "valorarnos" o de lo que hacemos. Amarnos a nosotros de un modo más profundo, incondicional. Es un camino difícil pero posible. 

La autoestima, una parte importante de ella, se consolida en nuestra edad infantil. Pero muchas veces por ausencia de nuestros padres (algún familiar enfermo, preocupaciones laborales, económicas etc) o por bullying en el colegio etc, se nos puede ver afectada al haber sufrido carencias. 

Llegaremos entonces a la vida adulta teniendo que afrontar crisis personales algo más incómodas que el resto, pero que sobreponiéndonos a ellas y remontando estas situaciones complicadas de forma superadora, lograremos salir fortalecidos y hechos a nosotros mismos, por lo que se podrá ver en la fuerza interior que inspiraremos, y en la potencia personal alcanzada. Claro que ese camino no es fácil, y como para madurar hay que sufrir y aprender de lo que se sufre, y aprender a seguir viviendo mientras se sufre, no siempre resulta motivador, y aunque todos queremos estar bien, luego tendremos no sólo que querer, sino poner de toda nuestra voluntad para salir adelante. 

Los recursos que tengamos a nuestro alrededor, familiares, amigos o pareja que nos ayude, serán facilitadores, aunque el empujón último nos corresponde. 

¿Y cómo podemos mejorar la autoestima e influir sobre ella una vez somos adultos? ¿porqué hay mucha teoría pero nadie me explica? Estoy condenad@ a quedarme así con baja autoestima de por vida, sólo porque se forjó en mi edad infantil?

Las respuestas es No. Puedes mejorar la autoestima y de ahí que cobre sentido nuestro trabajo como terapeutas. 

¿Y cómo? pues influyendo sobre una parte de la autoestima, nuestro autoconcepto, el concepto que tenemos de nosotros mismos. Si empezamos a tener mejor concepto de nosotros mismos, influiremos en nuestra autoestima global, nos sentiremos mejor con nosotros mismos, más orgullosos, y más queribles. Además al valorarnos mejor, nos haremos más queribles a los demás, y estaremos menos pendientes de la búsqueda dependiente y nociva y obsesiva de amor, por lo que estaremos en mejores condiciones de hacernos queribles y encontrar a compañeros más equilibrados y que nos den relaciones más adecuadas. 

Ahora bien, ¿Cómo puedo influir sobre mi autoconcepto?

Pues sobre mi autoconcepto puedo influir haciendo y manteniendo "conductas de autoafirmación". ¿Qué son estas conductas? Son las conductas que hacerlas nos llevan hacia el camino que queremos, que nos llevan a lograr lo que deseamos, lo que nos hace bien etc. Por ejemplo, 

- Salir a caminar y hacer ejercicio físico, para cuidar nuestra salud mental, la salud del corazón etc. o hacer otro tipo de deporte que se que me beneficia

- Implicarme en cosas de trabajo que me hacen sentir realizada, aun cuando me de pereza, o no sepa cómo empezar etc. 

- Dejar de mirar redes sociales o televisión sí se que me quita tiempo para pasar con mis hijos, el trabajo o hacer deporte. 

Las conductas de autoafirmación a veces ocurren son por acción y otras por omisión (no hacer algo que se que me perjudica, por ejemplo beber alcohol, o comer grasas si tengo colesterol)

Todas esas conductas que me hacen sentir bien al hacerlas, cumplirlas y lograr esos pequeños objetivos, y me llevan en la dirección saludable, son las que llamamos conductas de autoafirmación, y que influyen directamente en nuestro autoconcepto, me tendré en mejor consideración, quedaré contento de mí mismo y de cumplir mis propósitos, y si quedo contento de mí mismo, estaré en mejores condiciones de amarme. 

Para ello, necesitaremos hacer uso de nuestra inteligencia constructiva, como dice mi querido mentor Antoni Bolinches, en "el secreto de tu autoestima", o en "tus cuatro poderes", de la fuerza de voluntad, del egoísmo positivo (priorizarnos a nosotros mismos primero, para luego darnos a los demás de mejor modo). 

También nos conviene aceptar y comprometernos con nosotros mismos. Aceptar la realidad  a la que estemos sometidos en ese momento, aceptar nuestros puntos fuertes y débiles. Aceptar nuestras "neuras" y aprender a reírnos de ellas. "Aceptar las emociones, y los estados emocionales que atravesamos" , "aceptar nuestra historia de vida , familia etc" y comprometernos a influir sobre todo eso, con esfuerzo, superación, voluntad, poco a poco, paciencia, actitud positiva, y permitiéndonos ser humanos y errar, así como reforzando nuestras conductas de autoafirmación y premiarnos por cada uno de nuestros pasos. 

Superar la adversidad es posible, y mejorar nuestra autoestima también. Mejorarla, nos ayudará a ser más felices, sentirnos más seguros de nosotros mismos, y poder expandir nuestro potencial humano, contribuyendo además a la mejora del mundo. 

¡ÁNIMO!